A la hora de crear un nuevo negocio, una de las patas fundamentales es pensar el nombre. Eso es clave debido a que los futuros clientes o consumidores identificarán el producto a través del mismo, por lo que tener uno que sea fácil y sencillo de pronunciar es vital. A pesar de la importancia, suele ser uno de los momentos más difíciles de pensar.
El nombre va a ser la cara visible de la empresa, por lo que su elección, junto con la tipografía y los colores del logo es fundamental para cualquier emprendedor. Consultar con un profesional que sepa del tema puede ser una gran idea si se está muy perdido sobre qué nombre colocar y de qué forma.
ENCONTRÁ EL NOMBRE PERFECTO PARA TU EMPRENDIMIENTO
1. Define tu propósito y valores: Antes de buscar nombres reflexiona sobre la misión y valores de tu empresa. ¿Qué representa tu emprendimiento? ¿Cuáles son tus metas y principios? Uno efectivo debería reflejar la esencia de tu negocio. Pensar en los potenciales clientes también es muy importante, ya que son ellos quienes conocerán la empresa a través de su nombre.
2. Conoce a tu audiencia: Considera a quién va dirigido tu producto o servicio. Uno bueno debe resonar con tu audiencia objetivo y ser fácil de recordar para ellos. El mismo debe ser un poco universal, ya que en caso de que la empresa se expanda a otros países, el mismo no tiene que sonar raro y extraño en otros idiomas.
3. Investiga a la competencia: Asegúrate de que el que elijas no esté ya en uso por un competidor directo. Necesitas diferenciarte para destacar en el mercado. Ellos están hace más tiempo en el rubro y conocen cuáles son los términos que se pueden aplicar y los que no. Mirarlos y ver de qué forma construyeron su denominación puede ser un gran paso por el cual comenzar
4. Facilidad de pronunciación y escritura: Elige uno que sea fácil de pronunciar y recordar. También es esencial que sea fácil de escribir, ya que facilitará la búsqueda en línea y el boca a boca. Busca uno único y creativo que destaque. Evita nombres genéricos que puedan confundirse fácilmente con otros negocios.
5. Disponibilidad de dominio: En la era digital, es crucial verificar la disponibilidad de dominio para tu sitio web. Asegúrate de que el nombre que elijas esté disponible como dominio para evitar confusiones y dificultades en línea. No puede haber dos empresas que tengan el mismo nombre, y menos si se dedican a cuestiones similares que haga que las personas se confundan.
El proceso de elegir un nombre es algo que se tiene que tomar a la ligera y ser resuelto de forma abrupta porque se termina desviando de su objetivo principal. Lo clave es tomarse el tiempo que se necesita para que el mismo sea elegido de la mejor forma posible, y que se vuelva útil y apto para la compañía en cuestión.